La danza es un elemento esencial de la cultura Sudamericana. Se transmite de generación en generación, es parte de la vida cotidiana, impregna la historia de diferentes países. Perú no es una excepción, donde el encuentro entre la música andina y occidental ha dado lugar a más de 1300 géneros musicales. Entre los bailes típicos de la tradición peruana, es imposible no mencionar la marinera, el huayno y el baile de las tijeras.
- La marinera. Es un baile de pareja muy elegante que simula un cortejo amoroso. Se origina en la zona costera, pero está muy extendida por todo el país con variaciones. Su nombre original era zamacueca: fue cambiado a “marinera” Después de la guerra con Chile en 1879-1883, con honor a la Armada del Perú. Puede considerarse una danza criolla coma ya que mezcla elementos de la cultura indígena con características de la música española de los conquistadores y la tradición africana de los esclavos negros. El ritmo es alegre y trepidante y los bailarines utilizan pañuelos revoloteando para su coreografía.
- El huayno. Es una danza tradicional andina, de origen prehispánico. Nació como una danza tradicional para las ceremonias sagradas de los Incas. En los Andes todavía se canta en quechua, pero está muy extendido en América del sur con variaciones derivadas del encuentro con las culturas locales. Se acompaña con instrumentos musicales como el charango, la mandolina, la guitarra, pero también la bandurria o el violín. Es un baile en pareja, en el que los bailarines visten las ropas tradicionales de los Andes, con los típicos colores vivos. El rasgo principal es el zapateo, o el continuo el batir de los pies, al ritmo del cual el hombre persigue continuamente a la mujer y sólo ocasionalmente la alcanza. También se puede realizar como baile grupal.
- Baile de las tijeras. También conocida como la “danza de las tijeras”, es originaria del sur de los Andes. El nombre deriva del instrumento que originalmente sostenían los bailarines: 2 placas de metal que se acercaban continuamente. Esto se parecían a un par de tijeras que luego se usaron con versiones más modernas. En la coreografía se alternan momentos de baile grupal, donde los bailarines bailan en sincronía, y pasos de un solista. Es una danza ritual con elementos mágicos, capaz de recordar los espíritus de la religión Inca, como la Pachamama (o madre tierra). Se acompañan de violines y arpas y está muy extendido principalmente en las regiones de Ayacucho, Huancavelica, Arequipa, Apurímac, así como en Lima. en 2010 fue reconocido por la UNESCO como “Patrimonio Cultural Inmaterial de la humanidad”.
Peter Paul Huayta Robles